Las llamas han consumido más de 2000 hectáreas de bosques, destruyendo flora y fauna autóctona, provocando pérdidas estimadas en S/ 711 millones en patrimonio natural, más de 4300 animales afectados y 16 personas fallecidas hasta el momento. Ante la magnitud de la tragedia, diversas organizaciones y ciudadanos se han movilizado para ofrecer ayuda y concientizar sobre la importancia de preservar uno de los ecosistemas más ricos del planeta, mientras la ciudadanía critica la tardanza del gobierno en tomar medidas efectivas.
DESCONTENTO CON EL EJECUTIVO
El Gobierno Peruano ha declarado el estado de emergencia en tres regiones críticas: Amazonas, Cajamarca y San Martín. Estas áreas, que albergan una importante biodiversidad y comunidades indígenas, han visto cómo el fuego amenaza no solo sus recursos naturales, sino también la vida de miles de personas que dependen de los bosques para su sustento.
La presidenta del Perú, Dina Boluarte, ha enfrentado una ola de críticas debido a la demora en declarar el estado de emergencia frente a los incendios forestales que afectan varias regiones del país. A pesar de las solicitudes reiteradas por parte de autoridades locales, la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) tardó en aprobar la medida, lo que ha generado descontento en la población.
En respuesta, Boluarte defendió su gestión, afirmando que, a comparación del año pasado, el número de incendios forestales ha disminuido significativamente. En 2023 se registraron más de 1000 incendios, mientras que en lo que va de este año solo se han reportado 238.
Sin embargo, esta información ha sido cuestionada, ya que el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) ha reportado que hasta la fecha se han registrado más de 4000 incendios forestales solo en este año, lo que representa un incremento significativo en comparación con el año anterior.
Cientos de incendios y cero acciones. Composición por Milagros Calvay
MEDIDAS DEL MIDAGRI MEDIANTE AGROIDEAS
Ante los devastadores incendios forestales que han afectado a diversas regiones del país, Agroideas ha implementado una serie de estrategias destinadas a ayudar a los productores agrícolas a recuperarse y mantener su productividad. Estas medidas incluyen apoyo técnico, capacitación en gestión de riesgos y la promoción de tecnologías innovadoras.
Especialista en la Unidad de Monitoreo Agroideas, Nykol Alfaro, destacó la importancia de brindar asistencia técnica y financiera a los productores que han sufrido pérdidas. «Estamos canalizando recursos para garantizar que los agricultores puedan reestablecer sus cultivos y sistemas productivos. A través de fondos de recuperación y cofinanciamiento, facilitamos el acceso a herramientas que les permitan volver a producir lo antes posible», indicó.
Además, la institución ha puesto en marcha una serie de capacitaciones enfocadas en la gestión de riesgos, con el objetivo de fortalecer la capacidad de respuesta de los productores ante desastres naturales. Estas capacitaciones incluyen la planificación preventiva y las mejores prácticas para la restauración post-incendio. «Nuestro enfoque es brindarles a los productores las herramientas necesarias para afrontar y prevenir futuras emergencias», añadió Alfaro.
Estas iniciativas buscan no solo apoyar a los agricultores en la recuperación inmediata, sino también establecer bases más sólidas para enfrentar futuras amenazas climáticas, asegurando la sostenibilidad de la producción agrícola en el Perú.
UNIDOS POR LA AMAZONIA
La respuesta de la sociedad civil ha sido inmediata. Este miércoles 18, miles de personas se congregaron en las plazas principales de diversas ciudades del país para participar en la 5ta Marcha Pro Amazonía y Regiones en Llamas, una manifestación masiva en apoyo a las regiones afectadas por los devastadores incendios forestales. Ciudades como Cerro de Pasco, Lambayeque, Trujillo, Arequipa, Iquitos, Callao, Huacho, Cusco, Tacna, Lima, Puno y Piura fueron escenario de esta protesta pacífica, donde se alzó la voz por la defensa del Amazonas y la urgencia de tomar acciones frente a esta crisis ambiental.
Además, la movilización en redes sociales ha jugado un papel crucial para generar conciencia sobre la magnitud de los incendios forestales y la urgencia de implementar medidas preventivas a largo plazo. Diversas asociaciones de estudiantes, empresas y grupos de activistas han lanzado campañas de donación y solidaridad para apoyar a las comunidades afectadas y los equipos de rescate que trabajan incansablemente para controlar el fuego. Entre los grupos más activos en estas iniciativas destacan @juntosporlatierraperu, @fridaysfutureperu, @ruaperu.oficial, @mociccperu y @alsakuy.agroeco, quienes están convocando recursos y voluntarios para enfrentar esta crisis ambiental.
Foto: Federación Universitaria del Cusco – FUC
CONSECUENCIAS A LARGO PLAZO
El impacto de los incendios forestales en los bosques afectados es profundo y duradero. Según Valery Ramos, especialista de la ONG Naturaleza y Cultura Internacional, la restauración de bosques dañados por incendios puede tardar hasta 100 años, dependiendo de varios factores críticos. La intensidad del fuego, el tipo de vegetación y las condiciones climáticas posteriores juegan un papel crucial en este proceso de recuperación. Los incendios recurrentes agravan el daño, haciendo que la restauración sea mucho más compleja y prolongada. En algunos casos extremos, la regeneración del ecosistema podría extenderse a miles de años, especialmente si el bosque ha sufrido múltiples episodios de incendio.
Ramos también señala que los incendios pueden alterar la estructura del bosque de manera irreversible. Los árboles grandes y antiguos que proporcionan hábitats críticos y regulan el ciclo del agua pueden ser destruidos, y la pérdida de estas especies puede llevar a cambios significativos en la composición del ecosistema. La regeneración natural puede ser facilitada por la proximidad a áreas no afectadas, que pueden actuar como refugios de flora y fauna capaces de repoblar el área dañada. Sin embargo, la falta de áreas cercanas intactas puede hacer que la recuperación sea aún más lenta y complicada.
Por: Milagros Calvay Laynes
