Por: Vianca Ortiz
La semana pasada se reanudaron las protestas en diferentes regiones del país que congregaron a miles de personas para exigir la salida de Dina Boluarte, el adelanto de elecciones generales y una nueva constitución.
Desde tempranas horas de la mañana del miércoles 4 de enero, las inmediaciones del Teatro Colón (Frente a la Plaza San Martín) estuvo cubierto por diversos colectivos que se reunieron para retomar la protesta. En tanto, los miembros de la Policía Nacional del Perú (PNP) se ubicaron en la Plaza San Martín para evitar el ingreso de los manifestantes.
Algunas de las personas que se congregaron llevaban banderas, pancartas y banderolas en el que pedían el cierre del Congreso, Asamblea Constituyente y justicia para los cerca de 20 fallecidos producto de los enfrentamientos con el cuerpo policial al interior del país.
Algunos asistentes a dicha movilización señalaron que el principal motivo por el que se suman a la marcha es porque están en contra del Congreso actual.
“Estoy marchando porque no quiero el Congreso”, expresó un manifestante.
Por otro lado, también señalaron estar disconformes con la represión policial y con las personas que se camuflan en las movilizaciones sociales y realizan actos vandálicos. Al respecto, el manifestante también indicó: «Soy de las personas que quieren una marcha pacífica, pero siempre hay infiltrados” .
Horas más tarde se registró enfrentamientos entre la policía y los manifestantes en su desplazamiento por la avenida Abancay para llegar al legislativo, mientras que la Plaza de Armas lució acordonada por un grupo de policía a fin de evitar el ingreso de cualquier persona.
