Por Carolina Padilla
Durante el mes de febrero diferentes medios locales dieron a conocer el asesinato de una trabajadora sexual transgénero en el distrito de Carabayllo y es que actualmente se sabe que mafias extranjeras son dueñas de las calles y cobran cupos por dejar que ellas sigan laborando.
La víctima quien se hacía llamar ‘’Rubí’’ fue identificada como Juan Aníbal Torres Silvano de 31 años y su asesinato fue viralizado en redes sociales a través de un vídeo. Ella fue secuestrada por el Jr. Chancay y trasladada hasta Carabayllo donde acabaron con su vida disparándole sin piedad 31 veces, según fuentes policiales
En el vídeo se oye la voz de un venezolano, quien amedrentaba a Rubí mientras le disparaba “Para que tú sepas, ¿oíste? Te vas… de esa… plaza”.
Las aterrorizan
Además de ella, son muchas las trabajadoras que viven diariamente con el miedo a ser asesinadas por estas mafias. Muchas trabajadoras sexuales ofrecen sus servicios en las diferentes calles del Centro de Lima, en Lince, San Juan de Miraflores y en los distritos de Lima Norte como Los Olivos, Comas y Puente Piedra. Esta red de proxenetas está integrada por venezolanos y colombianos que se encargan de cobrar cupos con exorbitantes montos, los cuales muchas veces son imposibles de pagar.
Durante nuestro recorrido por la Av. Nicolás de Piérola, Diario La Otra Cara conversó con una trabajadora sexual a la cual llamaremos Mariela para proteger su identidad, quien denunció que actualmente ‘’Son más las venezolanas en las calles del Centro de Lima y con mayor concentración por la av. Alfonso Ugarte’’, razón por la cual muchas trabajadoras sexuales y transgéneros peruanas se trasladan a la ex av. Colmena para captar clientes.
Nadie se libra
Recordemos que el año pasado estas mafias asesinaron a dos trabajadoras sexuales, una ecuatoriana y otra venezolana e hirieron a cinco más. Según fuentes policiales, fueron dos sujetos en una moto lineal quienes desataron esta escena de terror en los jirones Cailloma y Zepita, una vez más por el cobro de cupos para seguir laborando en esas zonas.