Como de película. Miles de mineros informales exigen al Parlamento la aprobación de la “Ley MAPE”. Foto: Raul Gomez
Cientos de protestantes con cascos azules y banderas peruanas, en simultáneo, se manifestaron a través de diversas marchas y bloqueos en regiones como Madre de Dios, Arequipa, La Libertad y también en el centro de la Capital, lo que evidencia una movilización nacional del sector minero informal, que representa a decenas de miles de peruanos.
Durante varios días, grupos de mineros informales habían instalado carpas y permanecido acampando a las afueras del Congreso de la República, como medida de presión para exigir que sus demandas sean escuchadas.
Días atrás, el Congreso no logró aprobar la Ley MAPE durante una sesión ordinaria, lo que generó gran descontento entre los mineros, quienes consideran que sus demandas han sido postergadas injustamente.
La tensión fue creciendo conforme pasaban las horas, sin una respuesta clara por parte de las autoridades legislativas, lo que derivó finalmente en la marcha masiva del pasado viernes.
El ambiente se tornó violento cuando un grupo de manifestantes intentó romper el cerco policial que resguardaba el Palacio Legislativo.
La Policía Nacional del Perú (PNP), incluyendo miembros del grupo de intervención rápida (GIR), utilizó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, provocando enfrentamientos en plena vía pública y obligando al cierre temporal de calles aledañas.
Resistencia. Grupos de mineros instalados a las afueras del Congreso de la República. Foto: El Comercio
Los mineros informales reclaman una legislación que les permita formalizar sus actividades y continuar operando sin ser criminalizados. Según indicaron, el proyecto de Ley MAPE plantea establecer un marco legal más flexible para acceder a la formalización, así como plazos y requisitos adaptados a las realidades de la minería artesanal.
Principales exigencias del sector minero informal
- Aprobación de la “Ley de la Pequeña Minería y de la Minería Artesanal en Perú”.
- Eliminación de procesos penales contra pequeños mineros en vías de formalización.
- Reconocimiento legal de sus asociaciones y cooperativas.
- Acceso preferente a zonas de exploración y explotación.
- Creación de un fondo de apoyo financiero para adquirir tecnología limpia.
- Descentralización de los trámites de formalización, con oficinas en regiones mineras.
«Queremos trabajar legalmente, con derechos y sin persecución. No somos delincuentes, somos padres de familia que queremos sustento para nuestros hijos», declaró uno de los manifestantes frente al Congreso de la República.
Organizaciones ambientalistas y analistas del sector, sin embargo, han expresado su preocupación sobre la iniciativa, pues advierten que una ley excesivamente permisiva podría alentar prácticas extractivas ilegales que afectan gravemente el medio ambiente, especialmente en zonas de alta biodiversidad.
El Congreso de la República, hasta el cierre de esta edición, no ha emitido una declaración oficial respecto a la aprobación del proyecto. La comisión de Energía y Minas tenía prevista una sesión extraordinaria para evaluar las propuestas planteadas.
Por: Raul Gomez