XIII Encuentro Interescolar de Sikuris. Pasacalle de los talleres escolares en la Plaza de Armas de Lima. Foto: Juliana Lara

Por: Juliana Lara 

El CZSM realizó el XIII encuentro interescolar el domingo 4 de diciembre en el Parque Universitario. El evento reunió a 17 grupos escolares de sikuris tanto de Lima Metropolitana como provincias.

La organización tuvo como principal objetivo difundir el trabajo cultural realizado por los diferentes colegios y así motivar la formación de más agrupaciones sikuris. Para Enrique Puchoc, director del CZSM: “Este XIII encuentro interescolar es una oportunidad para compartir y conocerse entre los talleres escolares.”

El sonido de los pueblos andinos

El siku es un arte ancestral caracterizado por el sonido del viento de la zampoña. El siku es una tradición de los pueblos andinos, que representa su cosmovisión y valores como la solidaridad, integración e identidad. Es un arte colectivo, donde los músicos entonan melodías con mucho sentimiento, mientras tocan la zampoña y bailan. Para el director del CZSM el arte del sikuri ayuda en la formación de valores a los jóvenes y apreciación de nuestras tradiciones.

Diario La Otra Cara entrevistó a algunos talleres escolares de sikuri presentes en el XIII encuentro interescolar

CENTRO CULTURAL RIMAQ WAYRA 20 DE ABRIL

Analía Álvarez, directora del Centro Cultural Rimaq Wayra 20 de abril, explicó que el taller nació como parte de la tradición del Centro Cultural, es así que reúne estudiantes de diferentes colegios y de otros talleres de Rimaq Wayra. Actualmente, su centro de actividades culturales es Laura Caller.

Para Iván Manco, director del Centro Cultural Rimaq Wayra 20 de abril, el taller reunió a alrededor de 28 niños. Entre ellos, pequeños de inicial que participaron como personajes, imillas (bailarinas) y hasta alferados (representación de padrinos de la fiesta). Los instrumentistas fueron los niños de primaria y secundaria de colegios de Los Olivos. Los escolares ensayaron todos los sábados y domingos para su presentación.

Respecto al XIII interescolar, el director enfatizó: “Este encuentro motiva a los chicos a seguir transmitiendo y desarrollando el sikuri. Agradecemos a la organización del CZSM por fortalecer estos eventos donde participan talleres de diversas agrupaciones y compañeros sikuris de muchas partes de Lima, incluso provincias. Esperamos que no solo se celebre este encuentro una vez al año”.

En esta misma línea, el director refirió: “El siku genera valores, es un arte milenario preincaico. Es una expresión, aprendizaje y cultura. Promueve la colectividad, el ayni o apoyo mutuo y la reciprocidad, porque el sikuri es un arte que se toca en pareja. No se puede tocar individualmente. Esto es muy importante, porque la sociedad es quizás un poco individualista. Entonces, el siku promueve ese vínculo entre nosotros, entre hermanos”.

Visión que compartió la directora Analía Álvarez: “Este vínculo importante, el trabajo colectivo, hace que el grupo humano se fortalezca. Así que esos valores de solidaridad y de organización del grupo humano son importantes”.

Los estudiantes del Centro Cultural Rimaq Wayra presentaron composiciones del estilo Huancané. Comenzaron con el tema Inchupalla y cerraron con la diana Petete —composición corta de homenaje. El público saludó con fuertes palmas el trabajo cultural del grupo.

La expresión de la juventud. El Centro Cultural Rimaq Wayra 20 de abril mostró el trabajo cultural realizado con los escolares desde los más pequeños hasta los más grandes. Foto: Juliana Lara

CENTRO CULTURAL KORI KAKASHI

Héctor Ari Apaza, director del Centro Cultural Kori Kakashi explicó que el trabajo cultural del taller escolar forma parte del legado de la agrupación. Su historia inicia con sus padres, quienes emigraron a la capital en 1960. Luego, los hijos continuaron la tradición del siku y formaron parte de la segunda generación en 1983.

El director comentó que el taller abrió sus puertas el 3 de abril del 2022, mientras que el 17 de abril iniciaron las convocatorias, donde participaron alrededor de 35 niños y adolescentes, entre inicial, primaria y secundaria. Pero no fue un camino fácil, pues no contaban con un lugar de ensayo. Aun así, el grupo aprovechó los parques y campos deportivos para difundir su arte y prepararse para el XIII encuentro.

“8 meses de arduo trabajo. Los muchachos ensayaron todos los viernes, sábados y domingos para este día. Cada uno con sus propios peculios, pues no tenemos auspicio. Valerosos y maravillosos, yo les digo: mis maestros. Somos una familia musical de la que estoy muy orgulloso», enfatizó Ari Apaza.

Respecto al XIII interescolar, el director señaló: “Es un orgullo y honor el poder compartir con los hermanos sikuris escolares este momento grandioso. Es la primera vez que estoy haciendo un grupo en tan solo 8 meses, no esperaba tantos logros, pero estoy muy agradecido con los muchachos por darlo todo”.

Así, el Centro Cultural Kori Kakashi tocó para la entrada una diana del estilo Chiriguanos. Luego, con las dianas Kay Pacha y Taquen Pacha en ofrenda a la Pachamama —estas fueron composiciones del director. Cerraron con el tributo a los sikuris Kakashi fallecidos denominado Kimsa Jilata, título de creación propia de la agrupación en homenaje a su padre, tío y primo.

El legado Kakashi. El Centro Cultural Kori Kakashi compartió la tradición cultural del siku realizado por los niños y estudiantes de la agrupación. Foto: Juliana Lara

TALLER DE SIKURIS WILALLAQTA:  I.E.P ALFREDO REBAZA ACOSTA DE LOS JAZMINES

Jorge Ramírez, director del Conjunto de Sikuris WilaLlaqta, explicó que el taller nació a mediados del año entre julio y agosto como parte de una motivación artística, cultural y educativa tanto del conjunto como también de sus integrantes. «Surge con la iniciativa de poder hacer algo más allá fuera de las aulas”, resaltó el director.

Gracias al curso de educación cívica desarrollaron el taller de sikuris, pues comentó que el curso implica conocer sobre la ciudadanía y los valores culturales del ciudadano. Es así que en el colegio Rebaza, donde labora como docente, en la primera hora pedagógica enseñaba sobre la asignatura y en la segunda desarrollaba el taller de zampoña con todos los estudiantes de primero de secundaria. Dicho sea de paso, el colegio cuenta con cinco secciones en este grado.

Así, los estudiantes ensayaron desde cero. Sus clases y el patio del colegio fueron el espacio propicio para aprender y prepararse antes del XIII encuentro. El director enfatizó: “algo característico es el empeño y la disciplina. Ello ha motivado que algunos alumnos que estaban empezando de repente un poco más lento que otros sean los que hoy en día lideran el taller”.

Respecto al interescolar, el director señaló: “es una oportunidad para mostrar el trabajo realizado. Un espacio definitivamente donde los estudiantes se pueden forjar. Los jóvenes pueden forjar también ese espíritu cultural y de colectividad, que es algo muy característico del sikuri. Este encuentro aporta en la práctica misma de la valoración de este arte, y su difusión hacia la población.”

Además, el director destacó el carácter público del evento, pues muchas personas entre familiares, turistas y vecinos pueden acompañar a los jóvenes y conocer un poco más de su labor cultural. Esta fue una realidad en el XIII encuentro.

Los estudiantes del colegio Rezaba como taller Wilallaqta tocaron el Huayno Toril Torero. Luego, un huayno archivo y entonaron el huayno Corazón Mío. Cerraron con la diana Petete. Su presentación recibió los aplausos del público.

Cultura en las aulas. Estudiantes del colegio Rebaza Acosta del Callao compartieron su aprendizaje en el arte del sikuri desde las aulas. Foto: Juliana Lara

La ruta del XIII Encuentro Interescolar de Sikuri

A las 9:30 a.m., inició el pasacalle de los talleres escolares de sikuris. El punto de partida fue el Parque Universitario. Cada grupo desfiló al ritmo de la zampoña y la danza de imillas alrededor de la Plaza de Armas de Lima. Las vestimentas y banderas de los talleres pintaron alegremente las calles de la Plaza Mayor. Retornaron al Parque Universitario a las 10:30 a.m.

Pasacalle de sikuris. El Taller escolar de sikuris APPU desfiló al ritmo de la danza de las imillas y del sonido de la zampoña. Foto: Juliana Lara

A las 10:30 a.m. comenzó la Retreta de Sikuris. En esta actividad todos los talleres escolares tocaron la misma canción al unísono. Cabe mencionar que la retreta contó con dos secciones. En la primera parte, los sikuris de un solo bombo interpretaron las canciones Flor de Cactus y la diana Pollito. En la segunda parte, aparecieron los sikuris de varios bombos. Ellos tocaron las melodías Toril Torero, Corazón mío y diana Petete.

Retreta de sikuris. Los 17 talleres de sikuri tocaron y cantaron al unísono. La presentación conmovió a los presentes. Foto: Juliana Lara

A las 11:00 a.m. empezaron las presentaciones de cada taller escolar. Contaron con especialistas invitados como los profesores Dimitri Manga Chávez y Humberto Jacobo Puerta, egresados de la Escuela Nacional de Folklore (ENSF) José María Arguedas, y el profesor Carlos Enrique Sánchez, con una segunda especialidad en la ENSF. Ellos compartieron sus saberes en danza y música puneña con los encargados de las agrupaciones a fin de ayudarlos en su crecimiento en el siku.

Presentación de los sikuris. El taller de sikuris Rimaq Wayra presentó entre su repertorio Inchupalla del estilo Huancané. Foto: Juliana Lara

Desde el 2019, las ediciones de sikuri fueron presentaciones virtuales por el COVID-19, tal como el XII festival que desarrolló una serie de conferencias sobre el siku en el marco del interescolar, pero no congregó a los colegios de forma presencial hasta el XIII encuentro.

Es así que los estudiantes estrecharon lazos con los centros culturales de Lima y de provincia, como la Institución Educativa Juan José Vega Bello del Centro Poblado de Relave, Parinacochas (Ayacucho). Todas las presentaciones emocionaron al público al ritmo de la zampoña y el bombo, acompañados de cánticos y la danza de las imillas.

El evento generó mucha expectativa y emoción en el público presente, quienes entre lágrimas y aplausos reconocieron el trabajo de sus nietos, hijos y maestros sikuri. Muchos de los padres de familia pertenecieron en su infancia a los talleres sikuri. Es así que con nostalgia y  alegría acompañaron a los jóvenes. Asimismo, agradecieron al CZSM por generar espacios para la difusión del sikuri y saludaron la organización realizada.

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