Por: Vianca Ortiz
El Ministerio del Ambiente (Minam) instaló una comisión multisectorial que se encargará de ejecutar un Plan de Acción Inmediato y de Corto Plazo contra el derrame de petróleo en la comunidad de Cuninico.
Hace unas semanas, exactamente el 16 de setiembre, se produjo un derrame de petróleo cerca al río Cuninico que conecta con el río Marañón, afectando a la localidad del mismo nombre ubicada en el distrito de Urarinas en la región Loreto.
Esta problemática ambiental perjudica a muchos pobladores que se movilizan y dependen del río. Ante una serie de denuncias vía portales de noticias, se logró dar a conocer la situación insostenible de la localidad.
Posteriormente se llevó a cabo una reunión que presidió la representante del Minam Elizabeth Silvestre. Se dispuso responsabilidades y actividades a realizar con los distintos sectores participantes de la comisión, entre los que se encuentran ministerios y organizaciones como el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), Autoridad Nacional del Agua (ANA), Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), entre otras. Además de la principal dueña, Petroperú.
Por consiguiente, se han tomado acciones desde el Estado para enfrentar el problema del derrame de petróleo mediante la publicación de la resolución ministerial N° 187-2022-MINAM a través del diario oficial El Peruano que faculta la declaratoria de emergencia ambiental durante noventa días desde el 24 de septiembre.
La información recogida de dicha resolución señala que, según la Dirección de Calidad Ambiental y Ecoeficiencia de la Dirección General de Calidad Ambiental fue un suceso súbito y de impacto ambiental considerable para la localidad amazónica tras el derrame de aproximadamente 2500 barriles de petróleo crudo pertenecientes a Petroperú.
Sin duda, las consecuencias de estos desastres que impactan al ecosistema van más allá de lo que observamos a simple vista, por ello, exige una responsabilidad inmediata del problema. El cuidado del ambiente natural debe ser un asunto preponderante de abordar y el de nuestros ríos, específicamente, también.
