Por: Jhoana Baltazar
La agenda del Congreso se rigió, principalmente, por dos propuestas formales:
La primera consistía en adelantar las elecciones dentro de cuatro meses, es decir, en julio próximo, asimismo sumarle un referéndum para convocar, de ser el caso, a una Asamblea Constituyente. Esta fue presentada el miércoles por el congresista Jaime Quito (Perú libre) y tanto el sustento como la votación quedaron pendientes.
La segunda propuesta era de carácter urgente, tal como previó Dina Boluarte en su mensaje a la nación. Entró en vigencia desde horas de la noche del 1 de febrero por parte del Poder Ejecutivo, tras la primera negativa del Congreso de asistir a las urnas en octubre del 2023.
No obstante, Alejandro Cavero y Adriana Tudela (Avanza País) le solicitaron al Pleno que reconsidere su propuesta ya rechazada un día anterior, la cual programaba las elecciones complementarias para abril del 2024 y añadía una modificación para que sentenciados por terrorismo y expresidentes vacados no puedan volver a postular. De ese modo, los nuevos representantes asumirían a partir de julio.
Tras la votación, la reconsideración también fue rechazada con 70 en contra, 53 a favor y 2 abstenciones.
En medio del debate, la mayoría de las bancadas de derecha defendía la Constitución del 93 y calificaron el tema de referéndum como “inviable” e “inconstitucional”. Posteriormente, el proyecto desarrollado por Jaime Quito (PL) fue rechazado con 75 votos en contra, 48 a favor y 1 abstención.
En consecuencia, la Comisión de Constitución agendó revisar el proyecto presentado por el Ejecutivo este viernes 3 de febrero a las 3 p.m. Sin embargo, la misma archivó el proyecto de ley hasta la próxima legislatura que inicia a fines de julio, ya que según el artículo 78 del Reglamento del Congreso, si una propuesta de ley es rechazada, no puede presentarse la misma proposición.